

Nuestra Historia:
El corazón de Althea Crownwood
Una pasión que nace en familia

Althea Crownwood nació de una historia de amor y dedicación. Desde siempre, los perros y los animales han sido parte de nuestra vida; no podemos concebir un hogar sin ellos. Crecimos rodeados de ellos y aprendimos que cada animal merece respeto, cuidado y protección, lecciones que aplicamos en cada cachorro que criamos.

Cómo los Cobberdogs han transformado nuestras vidas
Para mí, Alberto Pérez, los Cobberdogs han sido mucho más que compañeros: me han ayudado a superar retos personales y a desarrollar habilidades que mi discapacidad psíquica hacía más difíciles, enseñándome paciencia, confianza y conexión emocional.
Cuando llegaron nuestros hijos, descubrimos el impacto real que los animales pueden tener en el desarrollo emocional y social. Los Australian Cobberdogs se convirtieron en compañeros de aprendizaje y crecimiento: su sensibilidad, inteligencia y capacidad de empatía nos enseñaron a vivir con más paciencia, alegría y conexión.
Ver cómo nuestros perros ayudaban a nuestros hijos a desarrollarse reforzó nuestra convicción de que un perro no es solo una mascota, sino un verdadero compañero de vida.
Una vida de equilibrio y amor
Los Australian Cobberdogs no solo han transformado nuestro hogar: nos han enseñado a vivir con más empatía, calma y alegría, y nos inspiran a compartir esa experiencia con cada familia que decide confiar en nosotros.
En Althea Crownwood, cada cachorro que nace es una promesa de bienestar, amor y equilibrio, preparado para integrarse en un hogar donde será tratado como lo que realmente es: un compañero de vida único.

Nuestra misión:
Excelencia en cada cachorro
Cuando decidimos criar Australian Cobberdogs, sabíamos que queríamos hacerlo bien. No nos conformábamos con cualquier línea de sangre: queríamos perros realmente excepcionales.
Tras mucho esfuerzo, establecimos una relación con Beverley Rutland Manners, quien nos confió continuar su legado ofreciéndonos a su propia perra personal de compañía. Este honor y responsabilidad nos guía cada día y refuerza nuestro compromiso con la crianza responsable y ética.
Cuidando cachorros y familias
Nuestro proyecto es personal y consciente. Cada camada y cada cachorro son cuidados con el máximo amor y atención. Pero no solo eso: también seleccionamos cuidadosamente a cada futura familia, entendiendo el porqué quieren un Cobberdog y asegurándonos de que cada cachorro encuentre el match perfecto, garantizando una vida feliz y plena para ambos.





